7 consejos para cuidar a toda la familia de las quemaduras por sol

En verano nuestra piel está mucho más expuesta a los rayos UV por prolongadas horas, ocasionando en algunos casos esta exposición síntomas como fiebre, enrojecimiento de la piel y ampollas. Aprende a prevenirlas y sobre los efectos a largo plazo de este tipo de quemaduras.

La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo, barrera natural que nos protege y alerta de los cambios externos. Más allá de sus funciones orgánicas, la piel también se ha convertido en un símbolo de belleza, siendo su tono y aspecto una preocupación constante de hombres y mujeres, sobre todo en verano cuando todos buscan el tostado perfecto, tras una larga exposición a los rayos UV, la cual en algunos casos puede ser peligrosa provocando quemaduras por sol graves.

¿Cuándo una quemadura de sol se considera grave? Según explica la pediatra de Clínica Bupa Antofagasta, Mónica Escudero, una “quemadura por sol es grave cuando la persona tiene los siguientes síntomas: fiebre, eritema generalizado (enrojecimiento de la piel), cuando presenta deshidratación y lesiones en la piel como ampollas. Estos síntomas afectan a adultos y niños”.

Antes de exponer nuestra piel a los rayos UV, es importante considerar que las quemaduras por sol pueden provocar daños a la piel como:

  • A mediano plazo: Las quemaduras constantes pueden provocar envejecimiento prematuro de la piel y aparición de manchas.
  • A largo plazo: Una persona que ha expuesto de manera prolongada su piel a los rayos UV, sin protección y ha sufrido quemaduras por sol, puede desarrollar cáncer a la piel. Este daño es el más grave, en Chile, en la Región de Antofagasta altos índices de la población ha desarrollado este tipo de cáncer.

 

¡En verano cuida tu piel!

 Por el uso de ropa más ligera, en verano debemos proteger las zonas más expuestas al sol como cara, antebrazos y piernas, además de seguir los consejos que la doctora de Clínica Bupa Antofagasta recomienda:

  • Usar bloqueador solar, con protección FPS superior a 30 es fundamental.
  • Integrar en la rutina diaria: Levantarnos, ducharnos y aplicar bloqueador solar inmediatamente, antes de salir a la calle.
  • El bloqueador debe ser factor 30 hacia arriba, ya que a partir de ese factor brindan una buena protección.
  • Aplicar bloqueador cada dos o tres horas, en las zonas más expuestas.
  • En la playa, volver a aplicar bloqueador solar, para evitar quemaduras e insolación.
  • Usar poleras manga larga, gorros o sombreros grandes. Hoy el mercado ofrece algunas prendas de vestir con protección UV.
  • Lentes de sol, nunca olvidarlos, ya que también son importantes para prevenir daños a los ojos.

 

Cuidados especiales para proteger la piel de los niños

 En vacaciones los niños pasan gran parte del día jugando al aire libre, por eso la pediatra recomienda:

  • Aplicarles bloqueador solar desde temprano en la mañana.
  • En la playa, luego de bañarse en el mar, se recomienda lavar la piel de los niños para retirar la sal y volver a aplicar bloqueador.
  • Los bloqueadores en spray son muy prácticos para aplicar en niños, no dejan la piel blanca, son de rápida absorción y alta protección.